"Lo que queda del PRI y los hará otro PRI".

Mientras Alito Moreno y Carolina Viggiano siguen hundiendo más al PRI al aprobar a modo su permanencia hasta 2032; Miguel Ángel Osorio Chong ya planea hacer su propio partido con los desertores del tricolor.

En primer lugar, tal parece que Alito y Caro no entienden o no quieren entender que su mala gestión ha llevado al PRI hasta donde ahora está, con un pie en la tumba, pues a nivel nacional solo conserva solo dos estados, mientras que en Hidalgo un municipio gobernado en solitario y con la candidatura común Fuerza y Corazón por Hidalgo (PRI-PAN-PRD) dos, que fue donde le tocó postular candidato.

Los militantes del tricolor ya se dieron cuenta que el partido es un desastre y necesita mejorar, un dirigente que vea por el partido y no por sus intereses personales, pero el único que no se ha dado cuenta o no quiere hacerlo, es Alito Moreno.

Si en verdad quisiera salvar al partido, ya habría renunciado y dado paso a alguien que no se haya entregado al gobierno federal para evitar ser investigado por sus fraudes millonarios.

Pero mientras Alito sigue viendo por sus intereses, Osorio Chong ya hasta propuso armar su propio partido con quienes renunciaron al PRI.

No le veo relevancia a esto, pues los que se fueron y fundarían al nuevo partido, aunque digan que no, traerían las mañas del PRI, pues no pasaron de balde tantos años en ese partido por el que se rasgaban hasta las vestiduras.

Además, yo digo que ya son muchos partidos, pues aunque desaparezca el PRD, aún debemos mantener al PAN, PRI, Morena, PT, PVEM y Movimiento Ciudadano; sin mencionar los que se deben mantener en lo local, como es el caso de Nueva Alianza Hidalgo.

Pero mientras se decide a hacerlo o no, en la entidad algunos del Grupo Plural Independiente (GPI) ya se pasaron al lado oscuro, con tal de que el manto sagrado de Morena los purificara de sus pecados.

Y con estos personajes se dicen ser la transformación, pero del PRI, porque pasaron de rojo a guinda.

Las elecciones ya acabaron, pero el destino de los partidos sigue dando de qué hablar, sobre todo el tricolor y Morena.