
Antes de que Monte Conner de Roadrunner encomendara a Scott Burns viajar a Río de Janeiro para producir Beneath The Remains, seguido de Arise, logró captar el salto que los brasileños consiguieron con la incursión de Andreas Kisser como guitarrista en Schizophrenia de 1987, momento en el que surge la verdadera esencia de una oscura genialidad y resplandor que alcanzarían los originarios de Belo Horizonte…
Grabado en los legendarios Morrisound Studios en Tampa Florida, Sepultura conquistaría la mirada de propios y extraños manifestándose como los indiscutibles reyes del Trash Metal con Arise, una obra maestra de alcances envidiables donde pieza por pieza explotan el concepto apocalíptico de un mundo sediento de igualdad y libertad, la línea “Under a pale grey sky” de Arise, está inspirada en “Under a blood red sky” de la canción New Year’s Day de U2…
Definitivamente los buenos resultados, en la mayoría de los casos, siempre son acompañados de una mayor inversión por parte de las disqueras, esto conlleva a la optimización de las condiciones del entorno que le permite a las agrupaciones centrarse totalmente en su capacidad creativa y compositiva para explorar dimensiones alternas desde su subconsciente, dominado por un intangible deseo de trascender más allá de un firmamento invadido por la aniquilación y desolación…
Arise, es una cegadora manifestación de virtuosidad, una constante aceleración y desaceleración entre transiciones sonoras que unen a cada uno de los componentes de sus interpretaciones, dentro de una realidad agonizante donde lentamente vamos perdiendo nuestra humanidad para convertirnos en un estéril vulgo sin emociones y sentimientos, donde la ira precede el caos interno que nos gobierna… I see the world old, I see the world dead.
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