Cortina de humo o no, pero se evidenció algo.

Hace unos días fue conversación el acto del que fue objeto la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo; esto, luego de que presuntamente un hombre, según la morenista, en estado de ebriedad o bajo los influjos de alguna sustancia, le hiciera tocamientos en plena calle.

Y digo “presuntamente” porque, aunque hay videos y más, siempre se tiene que presumir la inocencia del acusado.

Pero en fin, enseguida de que se dio a conocer el vídeo, salieron varios a decir que todo fue tramado por el gobierno federal para desviar la atención de lo que está pasando en Michoacán y otros estados.

Empezaron a decir que el presunto depravado es aliado de la 4T, pues tiene fotos con AMLO y demás, y que la presunta actuación de la presidenta evidenció el entramado.

Pero me cuesta trabajo crear que una mujer se preste a semejante acto aberrante solo para no ser señalada sobre la mala estrategia en seguridad que tiene, si es que tiene.

Me cuesta trabajo creer que una mujer se deje “manosear tantito” con tal de callar a los medios sobre lo que está pasando en el país y se enfoquen en un ataque a la presidenta.

Pero también me pongo a analizar lo que pasó. Primero, qué onda con sus guardias, por qué no actuaron y le cayeron como aboneros en quincena al agresor; o sea, tocó vil y asquerosamente a la presidenta!!!

Ahora, según lo que se ve en los videos, el tipo se le acerca demasiado al cuello y Claudia Sheinbaum no siente que le están invadiendo su espacio vital, una reacción natural para una mujer, sobre todo para quien ya ha sido víctima de acoso.

Yo sé que siempre está rodeada de gente y muchos se le acercan de más, pero también se siente esa vibra de cuando alguien se te acerca con malas intenciones.

Segunda, cuando el hombre sube las manos hacia el pecho de la presidenta; la reacción más común es quitarte rápidamente y poner cara de extrañada.

Si bien hay mujeres que se congelan en un acto así, y tal vez Claudia Sheinbaum no supo qué hacer, lo cierto es que ella sí cuenta con guaruras o elementos de cualquier corporación que la “cuidan”, por lo que debieron actuar inmediatamente sin pensarlo, como siempre lo hacen, primero pegar y después preguntar.

Porque para empezar, cómo fue que se les coló un ebrio o drogado hasta la presidenta?, qué hubiera pasado si en lugar de manosearla saca un arma para atacarla? O sea, sí me cuesta trabajo entender la situación.

Aunque sí evidencia que todas las mujeres estamos expuestas a actos de acoso, también deja ver que la presidenta necesita protección, porque aunque quiera seguir las costumbres de su mesías, de andar sola por el mundo, alguien le debería de recordar que AMLO es hombre y nadie querría tocarle sus partes, y ella es mujer y está expuesta en este mundo machista, misógino.

Cómo reflexión puedo decir que, si fue actuado todo solo para evitar más notas sobre la muerte del alcalde Manzo, qué lamentable que Claudia Sheinbaum se haya prestado a eso; pero si fue real lo que vivió, también lamentable que su seguridad no la haya cuidado y la haya dejado sola.

Porque ella que puede y tiene un dispositivo de seguridad, puede hacer uso de él las 24 horas. Además, qué bueno que ya detuvieron al agresor, pero ojalá la actuación de la policía, MP, y demás, fuera así de rápida con todos los casos.

Pero este es el México en el que nos tocó vivir y a seguir viviendo de las mentiras de Morena, de la minimización de los actos de violencia y del mal gobierno.

Aunque hay que puntualizar que el acoso en la calle hacia las mujeres existe, y sea actuado o no, debemos visibilizarlo y denunciarlo. Si es actuado, nos muestra una de las formas de cómo puede ocurrir, y si es real, nos muestra que en la vida real pasa y a cualquiera le puede ocurrir.